Valle del Francés

¿Qué se necesita para realizar un tekking por el Valle del Francés? Un buen estado físico, atuendo para la lluvia, zapatillas firmes y, claro, muchas ganas de caminar. Cumpliendo todo eso, nos aseguraron, no tendríamos problemas para realizar este trekking de mediana dificultad.

Comenzamos la aventura con un poco más de dos horas de caminata desde el Refugio Pehoé hasta el Campamento Italiano, donde aprovechamos de descansar unos momentos, hacer uso de los baños y comer nuestra merienda (esta parada no cuenta con venta de alimentos). Nuestro guía nos advierte que el resto del camino hasta el valle del Francés se volverá un tanto escarpado y con nieve, así que nos pide que mucha atención a nuestras pisadas.

Caminamos una hora y media por un sendero que se eleva en algunos tramos, atravesando un bosques de lengas, bajadas de agua y espacios abiertos para llegar finalmente al mirador Francés. Como si se tratara de un inmenso anfiteatro natural, desde ahí nos deleitarnos con una impresionante vista del Paine Grande, el macizo más grande del parque. También podemos apreciar los glaciares y tener el privilegio de presenciar el desprendimiento de algunos bloques de hielo, cuya caída resuena por todo el valle. Por supuesto, el más majestuoso de todos estos gigantes de hielo es el Glaciar Francés, el que roba nuestras miradas hasta que llega el momento de regresar y emprender el viaje por el mismo sendero que nos trajo hasta ahí.

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