Es una ruta extensa (de unos 10 km), pero sencilla y tiene la ventaja de que no es necesario pagar el ingreso al parque para poder realizarla. La caminata comienza en Laguna Azul y es perfecta para familias con niños o personas que buscan un trekking más relajado para explorar los alrededores del parque.

Por otro lado, tiene la ventaja de que no suele tener tanta afluencia de turistas, por lo que permite una conexión más profunda con el entorno. Una vez en la laguna Cebolla te esperan unas vistas hermosas de las torres.

El trayecto completo dura unas 5 horas (entre la ida y la vuelta). Para comenzar la ruta tienes que llegar a la entrada del parque por la portería Laguna Amarga. Un poco antes del ingreso verás hacia la derecha un desvío que lleva a la Laguna Azul, donde puedes dejar el coche y comenzar el sendero a pie.